miércoles, 31 de marzo de 2021

Ramón de Campoamor, poeta y político


En 2017 se conmemoraba el bicentenario de dos de los grandes de nuestras letras, el asturiano Ramón de Campoamor y el vallisoletano José Zorrilla. Ofrecí sendas conferencias en Valladolid y San Sebastián en las que hablaba de la relación entre estos escritores, dos de los que podríamos calificar de indispensables de nuestra Literatura. Fruto de ellas y de ese deseo de recuperar la memoria de ambos es este libro.

En él, además de resaltar la conexión entre ambos escritores, analizaremos la vida y obra de Ramón de Campoamor.

Nos vamos a centrar en dos vertientes de Campoamor, su ser como poeta y su ser como político. Como no podemos referirnos a un poeta sin hablar de su poesía, hallarán en el libro una selección de los poemas que hemos juzgado más interesantes para tener una completa visión de conjunto de su obra. Así como la crítica que de su obra hicieron personajes de la talla de Juan Valera o el asturiano Clarín. Cuando hemos incluido algún artículo de estos críticos literarios, lo hemos mantenido íntegro, sin realizar extractos de los mismos que, por una parte, responderían al gusto del autor de estas líneas y, por otra, podían no responder a las necesidades de las diversas personas que lean este libro.

Respecto al Campoamor político, van a encontrar una amplia reseña del desempeño de su labor como gobernador de Castellón, Alicante y Valencia, así como su quehacer, primero como diputado en el Congreso y luego como senador, ya que hemos incluido todos los discursos que pronunció.

Si el conocimiento que tienen de Campoamor se reduce al plano literario (hecho que por sí solo ya es encomiable) cuando lean sus discursos van a descubrir un Campoamor diferente, un Campoamor que no se puede deducir de la lectura de su obra poética.

Campoamor va a ser un liberal en el sentido más pleno de la palabra. Heredero de la tradición de las Cortes de 1812, va a creer en la libertad y va a luchar por ella. Que la libertad llegue a todos los ámbitos de la sociedad a va ser su objetivo, pese a los enemigos externos e internos que impidan el libre desarrollo de las personas y de la sociedad en que le tocó vivir.

Decía de él un contemporáneo suyo que “es acaso el único político que no sujeta su inteligencia y su corazón a los despóticos mandatos de un jefe de partido (...) es un soldado que no hace caso de la ordenanza ni de las voces de mando de sus jefes”.

Así fue Campoamor. Era capaz de denunciar las trabas que el propio gobierno de su Partido ponía a la libertad. Es de los pocos y honrosos casos en la historia parlamentaria en que un político pida la palabra para hablar en contra de los desmanes que está realizando el gobierno de su propio Partido. Y eso tiene su mérito, porque exige una rectitud moral, una claridad de ideas y una independencia de juicio bastante importantes y difíciles de encontrar.

Además de lo que les comento, el libro consta de un interesante apéndice documental en el que hemos incluido la reseña que doña Emilia Pardo Bazán (otra de nuestras grandes literatas) escribió sobre Campoamor y el discurso que el poeta asturiano pronunció en su ingreso en la Real Academia. Todo ello acompañado de una bibliografía completa y actualizada de Ramón de Campoamor.

No puedo terminar estas líneas sin agradecer a todas las personas que han colaborado a que este libro vea la luz.

Al ayuntamiento de Navia, representado por su alcalde, don Ignacio García Palacios y el concejal de Cultura, don Gonzalo Asenjo Palmerola, por haber creído desde el comienzo en este proyecto y haberlo apoyado con ilusión. Y por supuesto a todos ustedes que se han acercado a este libro. Les deseo que su lectura les permita profundizar en el conocimiento de este gran poeta, gran político y gran persona que fue Ramón de Campoamor.     


Prólogo del señor alcalde de Navia

 

Navia es de Asturias la región más bella,
aun siendo Asturias lo mejor de España.

 

(Ramón de Campoamor)

 

 

 

Ramón de Campoamor siempre ha sido una figura querida para todos los naviegos. No en vano, Navia ha entrado en la literatura universal gracias a este poeta que nació en nuestra tierra.

Desde este pequeño concejo del noroccidente asturiano en el que se ha encontrado el equilibrio entre la historia, la naturaleza, el deporte, el turismo y la industria miramos hacia el futuro, pero no podemos olvidar nuestro pasado ni a las personas ilustres que han nacido entre nosotros.

Por eso, les invito a que nos visiten y conozcan los lugares relacionados con la vida de nuestro poeta; que disfruten de nuestro rico patrimonio monumental y artístico y que participen en una amplia variedad de alternativas de ocio. Podrán nadar en nuestra ría durante el Descenso a Nado de la Ría de Navia, caminar por la costa en la travesía que la acompaña en todo su trazado, zambullirse en el agua de nuestras playas, disfrutar de nuestras fiestas patronales, degustar nuestra sabrosa gastronomía o, simplemente, descansar en alguno de los hoteles y casas rurales con que contamos.

Navia no sólo les va a recordar a Campoamor sino también van a poder gozar de nuestra hospitalidad porque les puedo asegurar que aquí nadie se siente forastero.

 

Hasta cuando quieran.

 

     Ignacio García Palacios

Alcalde del Excmo. Ayuntamiento de Navia 




miércoles, 24 de marzo de 2021

VI centenario del príncipe de Viana


 Este año se conmemora el sexto centenario del nacimiento de un singular personaje histórico, el príncipe de Viana.

Para recordarlo acabo de publicar este libro que ya se puede adquirir en Amazon.

  

miércoles, 17 de marzo de 2021

26 de marzo en Caparroso


 

batalla de Mendigorria

 


En Mendigorria se produjo una de las batallas que se describen en el libro.


En la plaza de los Fueros de Mendigorria a donde llevé de nuevo a Diego de León, esta vez en forma de libro, libro que podéis adquirir en Amazon y, si preferís hacerlo en las librerías, os basta ir a una, indicar el título, el nombre del autor y que lo distribuye Elkar. 

martes, 2 de marzo de 2021

Diego de León en ABC, 28/02/2021


 ABC, 28/02/2021

 

Diego de León | «¡Apuntad al corazón!», las últimas palabras de un héroe cordobés del siglo XIX

 

Este militar se sublevó contra el general Espartero y por ello fue fusilado hace ahora 180 año tras haber obtenido la gloria militar; un libro recupera su biografía

Félix Ruiz Cardador CÓRDOBA Actualizado:28/02/2021 22:41hGUARDAR

 

Para ir desde la plaza de las Tendillas hasta Alfonso XIII hay que caminar por la calle Diego de León, un nombre que a muchos poco les dirá. Justo al lado, persiste como viejo edificio lo que hoy se conoce como el Instituto Luis de Góngora y que en su origen fue el Colegio de Nuestra Señora de la Asunción. Y allí fue donde estudió este militar y héroe decimonónico de luengo mostacho y arrojo sin par, que con poco más de 30 años, y hace ahora 180, murió fusilado en Madrid en tiempos del general Baldomero Espartero, espadón emblemático de la época y contra el que se había sublevado. Cuenta la leyenda que justo antes de morir, gallardo él, Diego de León se fumó un habano y que fue él mismo quien dirigió a su pelotón de fusilamiento al grito de «¡Que nos os tiemble el pulso, disparad al corazón!». La mitología, forjada por algunos de los mejores escritores españoles, envuelve así al personaje y bien merecería una película que retratase sus gestas por el Norte de España, en las guerras carlistas, cuyo recuerdo persiste.

De hecho, con el fin de conmemorar su fusilamiento, el escritor vasco José Andrés Álvaro Ocáriz acaba de publicar el libro 'Diego de León, conde de Belascoain. El último romántico'. Se trata de un tributo en el que recopila y actualiza un texto biográfico anónimo de la época, que se completa con los relatos que tanto Benito Pérez Galdós, en uno de sus 'Episodios Nacionales', como Pío Baroja le dedicaron al alzamiento de Diego de León y a la lucha de los opositores de Espartero y defensores de la regente María Cristina, conocidos como Los Ayacuchos. También un poema de Ramón del Campoamor dedicado al personaje. Según explica Álvaro Ocáriz, de Diego de León «se ha escrito mucho sobre su muerte, pero poco sobre su vida», por lo que este trabajo recupera una versión más amplia de su biografía. Añade que es «un personaje muy curioso y quizá sirva para tomar conciencia de su importancia». El libro cuenta en su portada con uno de los cuadros que el pintor Augusto Ferrer-Dalmau le ha dedicado al militar.

De la vida cordobesa de Diego de León se sabe poco. Lo fundamental, que nació el 30 de marzo de 1807, hijo de Diego Antonio de León, militar y marqués de las Atalayuelas, y de María Teresa Navarrete. Muy joven se matriculó en el Colegio de Nuestra Señora de la Asunción y con apenas 18 años ingresó en el Ejército como capitán. A partir de ahí su vida fue hasta su fin puro vértigo, con continuos ascensos -comandante en la Guardia Real, coronel de los Húsares de la Princesa, comandante general de Navarra...- y glorias militares sucesivas en la primera guerra carlista. Durante la misma, fue uno de los principales bastiones en la lucha contra Carlos María Isidro y sus seguidores y dio muestras de arrojo en la batalla de Mendigorría, en la toma de Estella y Montejurra, en la batalla de Villarobledo o en el puente de Belascoáin, que tomó dos veces y le valió su título nobiliario. También anduvo por Andalucía tras los carlistas y persiguió al pretendiente por Cataluña, previa al Abrazo de Vergara que puso fin al conflicto civil. De la primera guerra carlista salió Diego de León convertido en uno de los más célebres militares, apodado como 'La Primera Lanza del Reino' y con distinciones como la Laureada de San Fernando o la Cruz de Isabel la Católica.

Su suerte, como se explica bien en el libro de Álvaro Ocáriz, cambió sin embargo a partir de ahí. Y es que el sosiego político, como era previsible en el inestable contexto del XIX español, no llegó. Bien al contrario, lo que se abrió fue una nueva crisis entre Espartero y la regente María Cristina, que se acabó marchando al exilio francés en 1840. La división frente a Espartero fue finalmente la que provocó el alzamiento de Leopoldo O’Donnell de 1841, al que se sumó Diego de León y cuyo principal objetivo era raptar a la Reina Isabel, por entonces una niña, para llevarla con su madre. La operación les salió mal al no recibir los apoyos esperados y el militar cordobés, que logró huir de Madrid, fue localizado por los Húsares de la Princesa, a los que tantas veces había dirigido en el pasado. Aunque le ofrecieron vía libre para que pudiese escapar a Portugal, Diego de León pidió que lo llevasen a Madrid.

Allí lo condujeron a Santo Tomás, el cuartel de la Milicia Nacional, y en apenas una semana el Tribunal Militar dictó para él sentencia de muerte. En el presidio hizo testamento, en el que legaba todo a su mujer, Pilar Juez, y a sus hijos, los niños José y Antonio, y escribió una amorosa carta a su esposa. «Quisiera estar hablándote toda la noche, por ser la última que te dirijo la palabra», le explicaba en una misiva que rubricaba con el lema «La muerte menos temida da más vida». Aunque hubo muchas voces pidiendo su indulto, el militar cordobés fue ajusticiado en la Puerta de Toledo, lugar al que lo llevaron en carruaje, vestido con uniforme de gala y con la banda de la Cruz de Isabel la Católica. «No muero como traidor», cuentan que fueron las últimas palabras de este cordobés valiente que vivió deprisa, deprisa, con el mismo vértigo alocado que se escribió la historia del XIX español.


Ya sabéis que podéis adquirir el libro en Amazon y que si lo buscáis en un librería, debéis decir que lo distribuye ELKAR.